sábado, 28 de mayo de 2011

Paradigmas de gobernación y de exclusión social en la educación

En el discurso en torno a las cuestiones educativas día a día se van construyendo y/o recuperando diferentes nociones que resultan fundamentales al intentar explicar la situación de la educación y sus determinantes. Entre las nociones que aparecen continuamente en el debate se encuentran las condiciones sociales, económicas y políticas y, dentro de éstas, el fenómeno de la exclusión aparece ineludiblemente.
En una época en que la exclusión se puede expresar en distintos niveles y contextos, se presenta el libro Paradigmas de gobernación y de exclusión social en la educación, el cual permite al lector asomarse a esta temática particularmente importante, considerando los profundos cambios que nuestra sociedad ha experimentado en su camino hacia la globalización y que repercuten en rubros tales como el educativo.
El tema central del libro es la exclusión escolar, vista desde la política educativa y la institución escolar, así como la exclusión social, con la que la mayoría de los autores establecen que la exclusión escolar mantiene una estrecha relación.
El libro es una coedición de la Universidad Autónoma Metropolitana, la Universidad Nacional Autónoma de México, la ANUIES y la Universidad Veracruzana, promovido desde su Instituto de Investigaciones en Educación. El libro está compuesto de ocho capítulos divididos para su análisis en tres partes:
1) El marco teórico de la exclusión e integración social en México.
2) La escolarización, gobernación y exclusión escolar, y
3) La igualdad, exclusión y diversidad en la escolarización en España. Investigaciones, enfoques y reflexiones.
La primera parte del libro constituye un acercamiento conceptual a la exclusión social, el cual es desarrollado por distintos autores en formas diferentes, sin llegar a unificar el concepto. En el primer capítulo, Littlewood, Herkommer y Koch nos hablan del surgimiento del término exclusión social, el cual fue empleado desde 1960 por Bourdieu y Passseron, y cuya acuñación se atribuye al francés René Lenoir, en 1974; igualmente abordan el discurso de la exclusión y los diversos usos que ésta recibe, así como la multidimensionalidad del término.
Hilary Silver, por su parte, en el capítulo 2, aborda la exclusión social e intenta definirla y clarificar sus diferentes significados y valores a partir de los tres enfoques paradigmáticos de la exclusión: solidaridad, especialización y monopolio, siendo el de solidaridad el más difundido.
De esta manera, se plantean al lector distintas formas de visualizar a la exclusión, con el propósito de ofrecerle la oportunidad de entender las disputas que se han suscitado alrededor del término a través de la historia y en contextos diferenciados, así como la posibilidad de construir desde su particular perspectiva una definición del término.
Para finaliza esta primera parte del libro, Littlewood hace una aproximación a la exclusión situándola propiamente en la institución escolar, en la cual identifica distintos mecanismos de exclusión y autoexclusión (concepto que retoma de Bourdieu), refiriéndose así a la escuela como una institución excluyente, en la cual se efectúa, a la vez, una reproducción social. Con este documento tenemos un referente teórico para el abordaje de la siguiente parte del libro, además de brindarnos elementos que se confrontan con algunas de las ideas expuestas por otros autores como parte del mismo volumen.
En la segunda parte de la obra, Dubet analiza la exclusión escolar distinguiendo cuatro tipos de escuela: la escuela de castas, la de integración desigual, la de elitismo democrático y la de igualdad de oportunidades. A partir de su revisión, enfatiza el universalismo que ha permeado los procesos escolares, donde se trata a todos los individuos por igual, y subraya la creciente tendencia a la integración cultural. Dubet pone en cuestión la relación directa entre exclusión escolar y exclusión social, afirmando que la escuela está en el centro de la contradicción de la sociedad liberal contemporánea: por un lado, tiende a asumir el postulado moderno del principio de igualdad de todos los individuos, que las políticas escolares se esfuerzan por asumir íntegramente; por otro lado, las sociedades liberales también son las sociedades del mérito, que reafirman las virtudes de la competición justa; dicho de otra manera, la escuela trata de forma igualitaria a los alumnos que ella diferencia; es esta contradicción la que genera la exclusión escolar.
Esta idea es sumamente discutida en otros capítulos del libro, ya que, para otros autores, exclusión escolar y exclusión social van de la mano, o bien, la primera produce a la segunda.
 El autor finaliza presentando una descripción del sistema educativo en Francia realizada por Antonio Luzón, en la cual se encuentra cada uno de los niveles educativos y una breve semblanza de la situación de sus actores principales.
Más adelante, Popkewitz y Lindbland, a través del texto “Gobernación educativa e inclusión y exclusión social: dificultades conceptuales y problemáticas en la política y en la investigación”, señalan cómo la relación entre la administración social del Estado y los problemas de inclusión y exclusión social son un tema cada vez más importante en la política del bienestar de las naciones, además de encontrarse históricamente vinculados a los procesos de globalización y los ideales de la participación democrática. El propósito de su escrito es cuestionar las suposiciones asumidas sobre gobernación e inclusión y exclusión social en la investigación política educativa, examinando dos problemáticas: la equidad y el conocimiento. La gobernación es, según estos autores, la mezcla de políticas que produce inclusión, eliminando así la exclusión de grupos por cuestiones de clase, género, raza o etnicidad.
Este apartado representa una invitación a la reflexión sobre diferentes cuestiones ligadas a la exclusión, tales como la fabricación de identidades, donde resaltan el surgimiento de híbridos de identidades como resultado de la globalización y los movimientos económicos, sociales y políticos a nivel mundial.
Para finalizar, Berkhout y Wielemans nos presentan una crítica sobre lo más reciente en relación a política educativa; el documento que los autores nos ofrecen se encarga de revisar algunas dimensiones problemáticas de los recientes enfoques para analizar e interpretar la política educativa, al tiempo que proponen un modelo heurístico integrador del proceso de la política educativa, según el cual ni la educación ni los procesos de política educativa deberían estudiarse de forma fragmentada o aislada.
La tercera y última parte del libro nos aproxima, en un primer momento, a un conocimiento del sistema educativo español, donde autores como Miguel A. Pereyra analizan la etapa de aplicación de la reforma socialista bajo los gobiernos de Felipe González. Señalan cómo el sistema educativo español es un sistema dual, donde se privilegia al sector privado y la escuela pública atiende a los niños de más baja condición social, contribuyendo a la exclusión escolar. Abordan la exclusión en las escuelas centrándose en las visiones de los actores sociales y de estudiantes, los cuales no se perciben a sí mismos como excluidos y cuya percepción merece ser considerada; para realizar tal enmienda toman como referente un proyecto internacional de investigación, el Proyecto EGSIE1 (Educational Governance and Social Integration and Exclusion in Europe).
Recordemos que en la segunda parte de la obra, Luzón nos presentó al sistema educativo francés, lo que da la pauta para analizar ambos sistemas educativos (francés y español) a nivel de comparación en cuanto a su estructura y la exclusión escolar, así como las similitudes y diferencias en sus actores.
En un segundo momento, y como elemento final del libro, se incluye un texto de Magdalena Jiménez y Antonio Luzón, quienes analizan a los jóvenes como un grupo social susceptible de padecer posibles procesos de inclusión/exclusión escolar, considerando además los antecedentes familiares de los mismos. El texto que nos presentan forma parte también del proyecto  ; hace un análisis del discurso de los jóvenes buscando interpretarlos en función de su proceso de transición, el cual sitúan al término de la educación obligatoria, y lo definen como una manera de entender las ideas que tienen los jóvenes sobre tópicos como la escuela, el trabajo, las posibilidades de movilidad laboral y estudiantil, así como sus perspectivas de futuro y sus implicaciones con aspectos económicos, culturales y sociales.
Jiménez y Luzón destacan la existencia de circunstancias determinadas que pueden incidir u ocasionar que las transiciones de los jóvenes no sean satisfactorias y conlleven procesos de exclusión social. Al estudiar el imaginario de los jóvenes resaltan cómo éstos encuentran, en distintos espacios y niveles, la presencia de la exclusión. Algo significativo es la confianza que los jóvenes manifiestan tener en la educación, siendo ésta fuertemente apreciada; aunado a esto, los jóvenes insisten en que sus antecedentes familiares no tienen nada que ver con su formación y crecimiento profesional y personal (postura meritocrática). Todas las consideraciones anteriores nos permiten formular distintas interrogantes alrededor de la juventud, así como desarrollar posibles teorías explicativas en cuanto a sus posturas y la forma en que se desenvuelven en la vida social, económica, laboral, política.
De manera general se puede afirmar que el libro es una excelente alternativa para acercarse al tema de la exclusión desde distintos enfoques y atendiendo a una diversidad de elementos, dado que en las lecturas algunos autores llegan a plantear posturas inclusive opuestas en relación a la exclusión escolar y a la política educativa; de esta manera, quien se encuentra con esta obra tiene una diversidad de posturas en cuanto a su temática central, por lo que puede ir construyendo su propia visión del tema y apropiarse de aquellos aspectos que le parezcan pertinentes.
Si bien los estudios y reflexiones se concentran en la educación europea, específicamente en Francia y España, las afirmaciones de los autores son aplicables y discutibles en relación al sistema educativo mexicano; del mismo modo, indagando un poco más acerca del sistema educativo en México, se tendría oportunidad de hacer un análisis comparativo entre los sistemas educativos mexicano, español y francés.
La obra retoma también, en distintos capítulos, la cuestión de la gobernación en la exclusión social y escolar; desde la perspectiva del Estado, las políticas que de éste emanan se encaminan a eliminar la exclusión, pero la realidad, al menos en nuestro país, suele tomar distintas tonalidades en los diferentes contextos, dada la diversidad de la población mexicana y sus condiciones socioeconómicas. Este aspecto, que desde hace algunos años viene tomando fuerza en el discurso de la investigación mexicana, puede ser ampliamente discutido a través de los referentes teóricos que el texto aporta.
Resulta particularmente interesante la recuperación de la noción de juventud que se presenta en la parte final de la obra. La exposición que se hace acerca de las percepciones de los jóvenes en torno a la exclusión escolar, puede ser de gran ayuda para quienes están inmersos en estudios sobre juventud o bien para aquellos que están interesados en realizar este tipo de investigaciones.
Finalmente, podríamos afirmar que el libro es una puerta abierta para la reflexión acerca de la exclusión y puede resultar muy interesante y provechoso para todos aquellos que se encuentran trabajando cuestiones relativas a equidad social y escolar, así como aspectos de la sociología educativa, innovación pedagógica y política institucional.
Notas
1. Education Governance and Social Inclusión and Exclusión in Europe es un proyecto de investigación internacional de la Unión Europea, parte del proyecto TSER (Targeted Socio-Economic Research) de la Dirección General XII (Ciencia, Tecnología y Desarrollo).
Luengo, J. (2005). Paradigmas de gobernación y de exclusión social en la educación. Barcelona/México: Pomares

No hay comentarios:

Publicar un comentario